Los expertos en dietas y salud no parecen lograr comprender qué debemos y qué no debemos comer para mantenernos delgados y saludables.
Recientemente nos presentaron otro conjunto de “nuevas” reglas alimentarias que básicamente tiraron por la ventana todo lo que creíamos saber de las últimas décadas.
Uno de los aspectos más controvertidos de estas nuevas normas es que una dieta baja en grasas y colesterol puede en realidad hacer más daño que bien.
Si has estado atento a las noticias sobre dieta y salud, sabes que esto es prácticamente lo contrario de lo que nuestros dietistas y nutricionistas nos han dicho durante años. Este informe del Foro Nacional de Obesidad (NOF) causó un gran revuelo, especialmente en Salud Pública de Inglaterra (PHE).
¿Qué normas alimentarias deberíamos seguir realmente? Para aclarar las cosas, hemos elaborado una lista de pautas que deberías tener en cuenta, independientemente de la controversia.
Puedes comer huevos.
Si bien anteriormente se había vinculado los huevos con enfermedades cardíacas y colesterol alto, investigaciones más recientes han demostrado que realmente son buenos para la salud, además de ser una gran fuente de proteínas.
Quizás quieras reconsiderar la dieta baja en grasas.
Estudios modernos han demostrado que seguir una dieta estricta baja en grasas es ineficaz tanto para la pérdida de peso como para la salud en general. De hecho, algunas grasas son beneficiosas. Sin embargo, conviene vigilar los azúcares añadidos que puedan estar presentes en los alimentos.
Cuidado con los carbohidratos.
No es necesario eliminar los carbohidratos de la dieta, pero probablemente no debería basar toda su comida en ellos. Muchos expertos creen que los carbohidratos pueden provocar picos de azúcar en la sangre, lo que aumenta el riesgo de diabetes.
Todavía puedes comer carne roja, pero limita su consumo.
Incluir carnes rojas magras en la dieta puede ser beneficioso, pero conviene controlar su consumo. Según la Organización Mundial de la Salud, la carne roja se ha clasificado como un posible desencadenante de algunos tipos de cáncer, aunque se requiere más investigación.
Los frutos secos son un refrigerio saludable.
A lo largo de los años, los frutos secos han estado en disputa debido a su alto contenido en grasas y calorías. Sin embargo, las últimas investigaciones han demostrado que contienen grasas "buenas" y son un elemento clave de una dieta saludable.
Deja de comer tanta azúcar.
Puede parecer de sentido común, pero consumir demasiada azúcar definitivamente no es bueno. Deberíamos limitar nuestro consumo a unas seis cucharaditas al día, incluyendo alimentos como la miel, los jugos de fruta y los jarabes, además del azúcar blanco refinado.
¡Estas breves aclaraciones deberían ayudarle a mantenerse en el camino correcto para comer y vivir de manera saludable!