¿Cuántas veces has comenzado una nueva rutina de ejercicios solo para dejarla después de unas semanas?
Si esta situación te resulta familiar, quizás te alivie saber que no estás solo. Cualquiera que haya intentado empezar y mantener una rutina de ejercicios sabe lo difícil que puede ser. ¿Cuál es el truco para desarrollar un hábito de ejercicio sólido?
Según un estudio reciente, la clave para desarrollar un hábito de ejercicio saludable podría ser la combinación de una señal condicionada y una recompensa intrínseca.
El estudio, realizado por investigadores de la Universidad Estatal de Iowa, descubrió que se necesita más que una simple señal condicionada para mantener una rutina de ejercicio regular. De hecho, es la combinación de una señal y una recompensa intrínseca lo que puede conducir al éxito. Una señal puede ser algo como un despertador por la mañana o al final de la jornada laboral, mientras que la recompensa intrínseca puede ser algo agradable o algo que reduzca el estrés.
Si la rutina de ejercicios es intrínsecamente gratificante, la señal servirá como recordatorio de que es hora de comenzar esa experiencia placentera. Si la recompensa no es muy intensa, podría desencadenar un debate interno sobre si realmente deberías esforzarte para comenzar tu entrenamiento.
En otras palabras, si no te gusta la actividad, no te resultará muy gratificante en esencia. Es más probable que las personas se apeguen a las rutinas de ejercicio que les gustan. Nunca deberías deliberar sobre si realmente deberías hacer ejercicio o no; eso siempre es una mala señal.
Sin embargo, la recompensa intrínseca varía según la persona. Para algunas, la recompensa puede ser estrictamente psicológica, como el aumento de serotonina o endorfinas en el cerebro y el cuerpo. Para otras, puede ser la oportunidad de pasar tiempo con amigos o seres queridos. Sin embargo, desarrollar la recompensa intrínseca siempre requiere tiempo y experiencia.
Si estás empezando una nueva rutina de ejercicios y quieres mantenerla, debes asegurarte de prepararte para entrenar. Recuerda que no a todos les gusta hacer ejercicio al principio, pero con el tiempo, deberías empezar a sentirte mejor al entrenar y preferir esa sensación a la que obtienes al no hacer ejercicio.
Hacer ejercicio puede ser un cambio radical en tu estilo de vida. Cambiar tus hábitos y estilo de vida puede ser un gran reto. Sin embargo, si lo haces por tu salud, puede que valga la pena.